Por Ramón Elizondo
La lengua materna se refiere al primer idioma que prevalecía en una región determinada, la lengua que cada habitante conoció y aprendió en su entorno. El idioma materno es el que se aprende de manera natural, a través de la familia y el entorno social, por ello la lengua materna constituye la base del pensamiento local, regional y nacional.
Cada lengua es una visión única y refleja la forma en la que una comunidad ha resuelto sus problemas en su relación con el entorno y como ha formulado su pensamiento, su sistema filosófico y el entendimiento del mundo que le rodea.
Es un hecho que las lenguas son instrumento cultural, histórico y que requieren de una profunda preservación, es por eso que toda iniciativa para promover la difusión de las lenguas maternas conservará también las tradiciones nacionales en el mundo.
Con la muerte y desaparición de una lengua materna, se pierde para siempre una parte insustituible de nuestro conocimiento, del pensamiento y de la visión del mundo.
El 21 de febrero celebramos el Día Internacional de la Lengua Materna