Por Ramón Elizondo (CEUGEA)
Actualmente escuchar hablar del respeto al medio ambiente y dentro de él a todas las especies es muy común, desafortunadamente es común por el preocupante estado de degradación del mismo.
Día a día vemos como grandes superficies de bosque son taladas, terminando con el hábitat de miles de animales que como consecuencia de la pérdida de su hábitat llegan a la extinción. Otra amenaza es la caza furtiva, pues algunas especies son cazadas para obtener su piel, su carne o son capturadas como artículos de lujo.
Todas las especies tenemos un papel importante y una estrecha relación dentro del medio ambiente, por lo cual si se afecta a una de ellas el daño es general. La extracción o la extinción de especies genera un desequilibrio en el ecosistema al perderse con la especie su función, de igual forma al introducir alguna que no pertenece a ese ecosistema se alteran los procesos del mismo. Los animales no son productos de comercio.